La red se ampliará fundamentalmente en los distritos de Chamartín y Tetuán.
Las ciclocalles, por las que pueden circular indistintamente ciclistas y coches sin superar los 30 km/h, tienen el objetivo de impulsar el uso de la bicicleta con un coste económico reducido. Estas vías se identifican por contener el dibujo de una bicicleta en el asfalto sobre un círculo con el número 30 en el interior. Los 62 nuevos kilómetros de ciclocalles se incorporarán a los 70 kilómetros existentes, al mismo tiempo que BiciMAD -el servicio de bicicletas públicas de la capital- instala 42 nuevas estaciones a lo largo de este año. Con estas medidas, en el Área de Medio Ambiente y Movilidad confían en consolidar la bicicleta como un modo de transporte sostenible.
