Se trata de una estructura cerrada, con capacidad para 24 bicicletas.
Los usuarios de este aparcabicis “smart” disponen de una tarjeta identificativa, que permite registrar la hora de entrada y salida de las bicicletas. La entrega y recogida se realiza automáticamente, en una cabina cerrada que las distribuye interiormente. De esta forma, cada usuario interactúa únicamente con su propia bicicleta, evitando el vandalismo y favoreciendo la seguridad. El aparcabicis cuenta a su vez con sistemas avanzados de comunicaciones, alumbrado y alarmas de robo y de incendios.