En agosto se realizaron las primeras pruebas para comprobar los parámetros operativos, técnicos y económicos de los vehículos.
La introducción de autobuses 100% a la flota de vehículos del transporte público de Praga, que garantizan cero emisiones en la operación del servicio, forma parte de un proyecto en el que están involucrados DDP (la empresa de transporte público de Praga), el fabricante de autobuses SOR Libchavy y Cegelec. El servicio se mantendrá a prueba durante un año, momento en el cual se considerará expandir su zona de operación a otras zonas de la región.