Universidad y Concello renuevan la subvención a 2.200 alumnos por cuatro años.
En 30 céntimos quedará el precio del billete del autobús urbano que los estudiantes de la Universidade da Coruña (UDC) tendrán que utilizar para acudir cada día a sus aulas en los cuatro principales campus de la ciudad. El rector de la UDC, Julio Abalde, y el alcalde, Xulio Ferreiro, formalizaron el pasado día 6 la renovación del acuerdo en vigor para subvencionar los próximos cuatro años el transporte público de algo más de 2.000 estudiantes que usarán para ello la tarjeta Millennium.
Solo el campus de Riazor, donde se encuentran las escuelas de Náutica, Turismo y Relacións Laborais, ofrece buena accesibilidad a pie o en bicicleta por su localización en el centro de la ciudad. Para llegar cada día a los que acogen la mayor parte de los centros de la UDC, sin embargo, el autobús resulta imprescindible y es el único medio público a disposición de los estudiantes. No hay alternativa al bus para los alumnos matriculados en Elviña, A Zapateira y Oza, y mucho menos para los de Bastiagueiro y Oleiros, dependientes de la línea A Coruña-Sada y A Coruña-Rialta.
Revisión de las líneas
La reformulación de los itinerarios de algunas líneas de autobús para corregir la centralidad de la cabecera de la línea UDC, que obliga a los estudiantes a desplazarse hasta la plaza de Pontevedra o a algún otro punto del trazado recto que conduce a los campus, es una demanda recurrente de los alumnos, pues en función del barrio donde residan algunos pueden necesitar cerca de una hora de viaje para ir a clase. En Elviña la movilidad pasa por la línea UDC que conecta el campus con la plaza de Pontevedra y por los trenes de media distancia que hacen parada en un apeadero ferroviario cercano, inaugurado por Renfe en 2002. Por A Zapateira circulan los autobuses UDC y la línea 24 que, sin haber sido concebida para comunicar el campus, presta servicio a los estudiantes de Filoloxía en la parte alta del monte. Y en el caso de Oza, el segundo complejo universitario más céntrico después de Riazor, únicamente el 2A se adentra hasta Fisioterapia, si bien otras cuatro líneas, con frecuencias dispares, tienen parada a 300 metros.
El convenio firmado en María Pita compromete a la universidad a aportar 250.000 euros para la financiación de las becas de transporte durante los próximos cuatro cursos y establece el cupo en 2.200 estudiantes, más de los que solicitaron ayudas el curso pasado. A pesar de las vacantes, la UDC decidió mantener el mismo número de beneficiarios, suficientes en un contexto de descenso de matrícula que la institución por el momento no ha conseguido revertir.
De las 2.200 ayudas ofertadas, las becas que finalmente se concedan cubrirán 300 viajes a un coste de 30 céntimos de euro.