Basado en 10 ejes, el plan propone un total de 86 medidas que deberán ser desarrolladas por las diferentes administraciones públicas.
La Autoritat del Transport Metropolità (ATM) del área de Barcelona ha presentado este mes de septiembre la propuesta de Pla Director de Movilidad (PDM) 2020-2025 que fue aprobada inicialmente por el conseller de Territori i Sostenibilitat, Damià Calvet. El documento está basado en 10 ejes que tratan de forma integral diferentes aspectos relevantes de la movilidad, y que persiguen un gran objetivo con cinco vertientes: una movilidad más saludable y sostenible; más eficiente y productiva; más segura y fiable; más inclusiva y equitativa y más inteligente y digital. Para llegar en cinco años a estos estándares de evolución, el plan propone un total de 86 medidas que tendrán un coste estimado de unos 100 millones de euros.
La propuesta de PDM se ha expuesto después de un año de elaboración en el seno de la ATM, pero también gracias al proceso participativo de seis sesiones públicas, a las cuales han asistido casi 700 personas, y se han recogido más de 700 aportaciones a través de la web www.pdmobilitat.cat.
El medio ambiente y un transporte más ecológico son algunas de las cuestiones capitales de este PDM. Por eso insiste mucho en reducir el consumo energético y el impacto de nuestros desplazamientos, así como las emisiones de vehículos, entre un 6 y un 16%. La visión ‘cero accidentes’ es también muy importante en este nuevo documento, que espera que se puedan reducir los accidentes de tráfico mortales en el área de Barcelona en un 51%, además de generar más espacios seguros y aumentar la fiabilidad del transporte público.
El PDM quiere consolidar la accesibilidad del transporte público, y propone medidas para llegar a una red donde sean accesibles el 92% de las estaciones de tren, el 80% de las paradas de bus y el 100% de autobuses. Además, reserva un papel importante a la perspectiva de género y de edad a la hora de planificar la movilidad de nuestro entorno.
El plan no pierde de vista la revolución que supondrá la digitalización del sistema de billetaje, y posteriormente el nuevo sistema tarifario. Un paso que marcará un antes y un después en la evolución tecnológica del transporte público en Catalunya. La propuesta, por otro lado, plantea la necesidad de afrontar nuevas alternativas de transporte personal, como los patinetes eléctricos, la movilidad compartida o el uso extensivo de las motos. Por eso apuesta por la convivencia de todo ello dentro de un nuevo marco normativo y legal.
El PDM se encuentra en periodo de información pública hasta finales de octubre. Después empezarán unos meses durante los que se incorporarán posibles alegaciones y diferentes informes, entre ellos ambientales. La previsión es que la aprobación definitiva tenga lugar a principios de 2020.
