A punto de comenzar la Semana Europea de la Movilidad, se analiza la experiencia desarrollada en Los Ángeles para implicar a los conductores en la consecución de una movilidad más sostenible.
Este mismo viernes, 16 de septiembre, comienza la Semana Europea de la Movilidad 2016 con el objetivo de concienciar a los ciudadanos y promocionar las bondades de la movilidad urbana sostenible e inteligente. Para la campaña de este año, y con el lema “Movilidad Inteligente, economía fuerte”, la Comisión Europea ha establecido cuatro áreas prioritarias de trabajo: descarbonización, ciudadanía, innovación y digitalización.
Europa se ha puesto como objetivos la desaparición gradual de los coches diésel de las ciudades de aquí a 2050 y alcanzar en 2030 una logística urbana de emisiones cero en el centro de las principales ciudades. Y para lograrlo, es necesaria una transición hacia el transporte limpio (vehículos eléctricos, bicicleta, etc.) y un mayor uso del transporte público u otras modalidades como compartir coches privados.
Algunas ciudades ya están poniendo en marcha medidas innovadoras que incorporan sistemas de recompensa a los conductores que optan por utilizar el transporte público o compartir el vehículo privado. Un ejemplo de ello es el proyecto piloto puesto en marcha durante doce meses en la ciudad de Los Ángeles.
Para mejorar la gestión del tráfico, ‘Los Angeles County Metropolitan Transportation Authority’, autoridad responsable del transporte en el área metropolitana de la ciudad, ha puesto en marcha la iniciativa ‘Metro ExpressLanes’.ÂÂ La compañía Xerox se encargó de implementar un sistema por el que los conductores tendrían que pagar un peaje por circular a lo largo de 50 millas (algo más de 80 kilómetros) en dos carriles habilitados en la autopista Interestatal 110. En estos carriles, los coches y las furgonetas compartidas, los autobuses y las motocicletas no estaban obligados a pagar por circular. De este modo, se recompensa el uso de transporte público y de vehículos compartidos.