El crecimiento anual fue del 17,57 % y los datos son un 4,81 % superiores respecto a las cifras de 2019, previas a la pandemia
El Transporte Urbano Comarcal registró el año pasado 42.594.429 viajes, la mayor cifra de su historia, lo que supuso un incremento del 17,57 % con respecto a 2022 y un ascenso del 4,81 % respecto a la situación anterior a la pandemia. Este crecimiento de la demanda fue paulatino a lo largo del año y en el mes de mayo de 2023 ya superaba ampliamente la de 2019.
El número de personas transportadas por las líneas diurnas fue de 41.582.922 (el 97,63 % del total), con un incremento del 17,06% respecto al año anterior. Todas las líneas diurnas experimentaron un ascenso de viajeros significativo con respecto del año anterior.
En 2023 las líneas más utilizadas fueron la línea 4 (Barañáin – Villava) con 8.630.031 viajes; la línea 7 (Villava – Txantrea – Barañáin) con 3.972.442; la línea 16 (Aizoáin – Noáin – Beriáin) con 3.902.395, y la línea 18 (Urb. Zizur Mayor – Sarriguren) con 3.516.383.
Las líneas con mayor incremento relativo, sin contar las del servicio especial de refuerzo al estadio El Sadar y la del Mercadillo –muy sensibles a las fluctuaciones de demanda al ser líneas con pocos viajeros–, fueron la línea 22 (Plaza Merindades – Lezkairu) con un 29,9 7%; la línea 17 (Berriozar – Mutilva); con un 24,82 %, y la línea 23 (Cordovilla – Olloki) con un 23,49 %. El crecimiento de las líneas L22 (Plaza Merindades – Lezkairu) y L17 (Berriozar – Mutilva) se corresponden con el desarrollo urbanístico de los barrios de Lezkairu, Mugartea (Mutilva) y Entremutilvas (Mutilva).
El número de personas viajeras en las líneas nocturnas fue de 1.011.507 (el 2,37 % del total), con un incremento del 43,31 % respecto al año anterior. Todas las líneas nocturnas experimentaron un ascenso de viajes muy significativo con respecto al año anterior (entre el 40 y el 50 %). Las más utilizadas fueron la N7 (Paseo de Sarasate – San Jorge – Txantrea – Baja Navarra) con 248.271 viajes; la N5 (Cortes de Navarra – Huarte) con 179.226, y la N2 (Paseo de Sarasate – Barañáin) con 154.527. El mayor incremento porcentual lo experimentaron la línea R3 (Refuerzo al Navarra Arena) con una subida del 127,83 %; la línea N2 (Paseo de Sarasate – Barañain) con un 52,23 %, y la N3 (Bajada de Labrit – Noain- Beriain) con un 49,73 %.
Este significativo crecimiento en el servicio nocturno se debió a la recuperación paulatina del ocio y de los eventos realizados en el Navarra Arena desde las restricciones debidas al Covid-19 entre los años 2020 y 2022 que llevó incluso a suspender el servicio nocturno o a restringirlo notablemente.