Un rediseño y adecuación de los servicios de movilidad con un marcado carácter medioambiental.
La Comunidad de Madrid inició los trámites para la renovación de todas las concesiones de las líneas de autobús interurbanos de la región, que contará con una inversión de 7.000 millones de euros para los próximos diez años, convirtiéndose en uno de los contratos más importantes de Europa en esta materia.
El consejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras, Jorge Rodrigo, presentó el pasado mes de junio, en la sede de la Consejería, el balance de gestión de su ámbito competencial y situó el nuevo mapa concesional como un gran avance en cuanto a la movilidad de los casi 300 millones de madrileños que utilizan el servicio. Entre sus principales ventajas, el consejero citó la ampliación de los medios de pago disponibles, permitiendo la validación con tarjeta bancaria.
Las líneas actuales recorren más de 22.000 kilómetros y cuentan con 22.500 paradas. Ante la magnitud del servicio es fácil intuir el gigantesco proyecto que se está confeccionando para mejorar una de las redes de autobuses más importantes de España. Esta actuación implica que todos los vehículos serán accesibles con un porcentaje creciente de motores que estarán impulsados por energías limpias.
Respecto a Metro de Madrid, pues no sólo se centró en el ámbito de autobús interurbano, el consejero recordó que la compañía se encuentra inmersa en su Plan Estratégico, con vigencia hasta 2030, y que incluye, entre otras medidas la mayor renovación de su flota de trenes, por valor de 1.000 millones de euros, de los que ya se han adquirido los primeros 40 de los 80 que llegarán al parque móvil del suburbano.
Igualmente, Rodrigo anunció que saldría a información pública, para recoger las aportaciones de los ciudadanos, el estudio informativo de las cuatro alternativas del trazado del tramo norte de las obras de ampliación de la línea 11 que conectará Valdebebas con la actual estación de Mar de Cristal.