A partir de hoy, dos líneas especialmente concurridas de la red, a las que se sumarán otras tres en otoño, van a funcionar de forma ininterrumpida a lo largo del fin de semana. Londres se unirá así a ciudades como Nueva York, Berlín, Sidney y Barcelona, también con servicios nocturnos en sus líneas de metro.
Con casi un año de retraso sobre la fecha inicialmente prevista, el metro de Londres estrena esta noche un servicio nocturno para los viernes y sábados en una ciudad que presume de estar despierta las 24 horas del día, pero cuyo principal medio de transporte cerraba hasta ahora alrededor de la medianoche.
La entrada en funcionamiento de este servicio –inicialmente en las líneas Victoria y Central– no solo pretende responder a la demanda de los “juerguistas” que disfrutan de la noche londinense sino también de todos aquellos trabajadores que concluyen su jornada laboral cuando el famoso Tube ya ha bajado la persiana de sus estaciones.
Medio millón de usuarios recurre al metro londinense pasadas las diez de la noche, pero entre las 12 y las 12.30, según las estaciones, el servicio se interrumpe, para sorpresa de muchos turistas que visitan la ciudad por primera vez. Las previsiones iniciales de la empresa que gestiona el metro de la urbe, London Underground, apuntan a que unas 100.000 personas utilizarán sus trenes a partir de esa última hora.