La medida está enmarcada dentro del Plan de Mejora de Calidad del Aire (PMQA en sus siglas en catalán).
Incluye la reducción de un 50% en el precio del transporte público y un aumento del 25% en el precio de los aparcamientos municipales y de los peajes que dan acceso a la zona metropolitana.
La medida no tiene un carácter permanente, sino que se aplicará únicamente los días en que los niveles de partículas en suspensión (PM10) o de óxidos de nitrógeno (NOX) sobrepasen los límites fijados por la Unión Europea.