Más de 4.500 cámaras cubren todo el servicio regular de la flota de autobuses de TMB para mejorar la seguridad de los usuarios y usuarias y del personal de conducción.
Se instalaron más de 4.500 cámaras en 1.027 vehículos para mejorar la seguridad de las personas usuarias y optimizar la gestión del servicio. Este sistema de videovigilancia permite grabar y emitir imágenes del interior de los autobuses en tiempo real.
El objetivo principal es disuasivo, y el sistema permite disponer de pruebas para denunciar posibles delitos (agresiones, acosos, robos, accidentes, etc.), en la línea de la lucha contra la LGTBI-fobia y el acoso sexual. Además, las cámaras también contribuirán al análisis de los niveles de ocupación y así se podrá mejorar el servicio.
En cada vehículo hay entre dos y siete cámaras, que permiten grabar todos los espacios. El Centro de Control de Seguridad de Bus puede ver en tiempo real las imágenes del interior de los vehículos y descargar las grabaciones al momento. En todos los casos, y para cumplir la normativa legal en este ámbito, las imágenes registradas se guardan un máximo de 30 días.
Paralelamente, la red de metro también dispone de 3.270 cámaras dentro de los trenes y 5.576 en instalaciones fijas: un total de 8.846 cámaras en todo el ámbito del metro, entre trenes y estaciones. Se prevé que todos los convoyes tengan instalado el sistema en el año 2025.