Los días 26 y 27 de mayo se celebró este XXIII Congreso Nacional de Transporte Urbano y Metropolitano que reunió a más de 250 asistentes.
El Palacio de Euskalduna fue sede del congreso, en cuya mesa de inauguración estuvieron presentes, junto al presidente de ATUC y el Consejero Delegado de Alsa, la Consejera de Política Territorial del Gobierno Vasco y el Alcalde de Bilbao. Juan Mari Aburto destacó en su intervención la apuesta decidida de su ciudad por la movilidad sostenible, recordando que Bilbao no sería la misma sin el metro o el tranvía.
A continuación, tres prestigiosos ponentes tuvieron ocasión de compartir su visión sobre el liderazgo con los asistentes. El presidente de Cabrera Management Consultants, José Cabrera, se preguntó si nuestras organizaciones están preparadas para responder con suficiente agilidad en un mundo de cambios acelerados, recordando que las antiguas estructuras empresariales no se crearon teniendo en cuenta esa cualidad hoy tan necesaria.
Ya centrados en la movilidad urbana, el siguiente ponente, Enrique Dans, profesor de Innovación en el IE Business School, hizo un repaso sobre los nuevos elementos que ya están empezando a componer el paisaje de nuestras ciudades, como las redes de car-sharing y más a largo plazo los vehículos autónomos sin conductor. Unos pilares sobre los que se podrá ofrecer una movilidad “a la carta” basada en una oferta de transporte público mixta y donde el coche será una de las múltiples opciones de transporte multimodales, bajo demanda y compartidas.
Finalmente, Luis Lombardero, Director del Instituto de Talento y Empresa Digital, se centró en la transformación digital, un proceso por el cual las empresas de un sector tradicional adaptan sus productos y servicios para defenderse de las disrupciones que llegan desde fuera del sector. Según Lombardero, el impacto de la transformación digital en el transporte colectivo pasa por el concepto de “smart city” y las infraestructuras inteligentes, que facilitarán la aparición de nuevos modos de transporte colectivo y cambiarán los modelos de negocio actual.
El acto de clausura corrió a cargo del delegado del Área de Circulación y Transportes del Ayuntamiento de Bilbao, quien señaló que si bien hasta ahora el reto del transporte era que fuera sostenible económicamente, ahora además se añade el de la sostenibilidad medioambiental.
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