Observatorio de la Movilidad Metropolitana

La Mancomunidad de Pamplona atribuye a la mejora económica y a las políticas de movilidad el récord de pasajeros del Transporte Urbano Comarcal

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La Línea 4 fue una de las que más creció (el 4,4%) y agrupa 1 de cada 5 viajes de una red que en 2018 ha superado los 39 millones

El transporte urbano comarcal vive su momento de esplendor y acaba de conseguir, después de tres años de subida, su cifra récord de uso, al superar en 2018 la barrera de los 39 millones de viajes. ¿A qué se debe? La Mancomunidad de la Comarca de Pamplona, según fuentes consultadas, considera que “por una parte hay que hacer referencia a la recuperación económica”, dado que “el aumento de usuarios en 2018 supone el cuarto año consecutivo de crecimiento tras la tendencia decreciente registrada entre los años 2009 y 2014”. De esta manera, “se han superado los resultados de hace diez años, cuando en 2008 se contabilizaron 38.518.647 viajes registrados antes del comienzo de la crisis económica”.

Además del repunte económico, la MCP atribuye el aumento del TUC a los “cambios” en lo que a movilidad se refiere “que se han realizado en el Primer Ensanche a partir de septiembre de 2017”, lo que, según indican, “han provocado un cambio en el reparto modal (menos uso del coche y más del autobús) en los viajes con origen o destino el centro y en los desplazamientos pasantes en la relación Norte-Sur”.

Los más de 39 millones de viajes registrados en el transporte comarcal en 2018 suponen que, al día, se realizan en torno a 138.000 desplazamientos, de los que más de un millar son en la línea 4 Villava-Huarte, la más utilizada de toda la red comarcal. Se calcula que uno de cada cinco viajes en la villavesa, el 21,54% del total del año pasado, fue en la L-4, que en total contabilizó 8.297.701 desplazamientos.

La línea 4, como recuerdan fuentes de la MCP, tiene un recorrido “por las zonas más pobladas de la Comarca de Pamplona”. Este hecho, unido a la frecuencia de paso, hace que sea una línea “muy eficiente en su operación”, es decir, “tiene una buena cobertura, que permite una buena frecuencia y, por tanto, se puede captar un buen número de viajes”, a lo que habría que añadir la circunstancia de que une el centro de la ciudad con los principales centros hospitalarios. La línea L-4 es una de las más extensas del transporte urbano, y mide más de 20 kilómetros (ida y vuelta) entre Villava y Barañáin y en torno a 23 kilómetros (ida y vuelta) en la extensión Huarte-Barañáin.

Los últimos datos suponen un récord de viajes, pero ¿cuántos viajeros se supone que cogen la villavesa como medio de transporte? Según el estudio de satisfacción de 2017, el 79% de los encuestados afirmaba haber cogido el TUC en los últimos tres meses, el 26% todos o casi todos los días. La villavesa es más frecuentada por las mujeres (según la misma encuesta, en porcentajes del 77%), y la franja de edad de 35-49 (29%) y 50-64 años (27%) son las que más la usan.

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